i) Un poste de Manón me lleva a preguntarme acerca de los deseos. de los míos puntualmente. y es extraño porque cuando eso sucede inmediatamente aparece una suerte de "mentalidad contable" que mercachiflea mi cabeza y se pone a hacer balances, cuadros de doble entrada, inventarios precisamente de los deseos. Como si se disparara un "evaluador de resultados", ponéle. Y con el tiempo fui observando -merced el tiempo, y merced mis lecturas de Bernstein, supongo además que otros muchos autores sostendrían esto mismo y también lo contrario, incluso menos traídos de los pelos como el que acabo de nombrar- que no es el resultado de esos balances, necesariamente contingentes, sino ese mecanismo disparado por la pregunta por el deseo, lo que resulta un poco agotador. Y ya no importa la pregunta por lo que sea, honestamente creo que no interesa (aunque hay campos más afines que otros), sino que me interesa poner bajo mirada qué mecanismos se desatan. Algo así.
ii) El video está porque, tal como le decía a Manón, mis deseos últimamente se dan de patadas con el principio de realidad o concretamente con "la suerte". (augusto y el viento formalizó un período que lo podríamos llamar "agarrate catalina") . Y entre el viento y los mecanismos hay algunos recuerdos que me hacen bien. que disfruto. Recordar al Shobogenji me distiende, me relaja. es un recuerdo que a su vez trae aquel otro descubrimiento: no había más zen en la cima de la montaña que en nuestro ombligo. Es un recuerdo feliz. Y es un recuerdo que no "hace contraste" (no podría explicar esta sensación ahora)
iii) Y es así como el Colectivo queda para estas reflexiones púfficas... y Mi Chota Feliz quedará para otras cosas... ni idea de si mejores o peores. Sin embargo, se necesita de tiempos a veces largos para reincorporar que aquel principio que dice "o esto o lo otro" no siempre aplica bien. O dicho de otra forma, ahora es "esto y lo otro". Ponéle.
ii) El video está porque, tal como le decía a Manón, mis deseos últimamente se dan de patadas con el principio de realidad o concretamente con "la suerte". (augusto y el viento formalizó un período que lo podríamos llamar "agarrate catalina") . Y entre el viento y los mecanismos hay algunos recuerdos que me hacen bien. que disfruto. Recordar al Shobogenji me distiende, me relaja. es un recuerdo que a su vez trae aquel otro descubrimiento: no había más zen en la cima de la montaña que en nuestro ombligo. Es un recuerdo feliz. Y es un recuerdo que no "hace contraste" (no podría explicar esta sensación ahora)
iii) Y es así como el Colectivo queda para estas reflexiones púfficas... y Mi Chota Feliz quedará para otras cosas... ni idea de si mejores o peores. Sin embargo, se necesita de tiempos a veces largos para reincorporar que aquel principio que dice "o esto o lo otro" no siempre aplica bien. O dicho de otra forma, ahora es "esto y lo otro". Ponéle.